En el diagnóstico moderno de la salud visual, el examen CORVIS se ha convertido en un aliado imprescindible para la evaluación profunda y no invasiva de parámetros corneales que impactan directamente en la toma de decisiones clínicas. Este equipo ofrece una ventaja competitiva al integrar tecnología de captura de imágenes de alta velocidad con mediciones objetivas clave para la planificación y seguimiento de tratamientos oftalmológicos, evaluación de la respuesta biomecánica corneal, tonometría y paquimetría.
El equipo graba la reacción de la córnea tras un pulso definido de aire usando una novedosa cámara de Scheimpflug de alta velocidad. Esta cámara captura más de 4.300 fotogramas por segundo, permitiendo una medición altamente precisa de la PIO y del espesor corneal. Basado en un vídeo.
El Corvis® ST mide la PIO, el grosor de la córnea y la respuesta de la deformación de la córnea. Basándose en estos datos, tiene el potencial de determinar un valor de PIO que no está influenciado por las propiedades biomecánicas de la córnea.
El CORVIS está indicado en múltiples contextos diagnósticos y terapéuticos que requieren información detallada sobre la biomecánica ocular. Se emplea en:
Estas aplicaciones hacen que el examen CORVIS sea fundamental en consultas donde se requiere una evaluación precisa de la presión intraocular sin interferencia biomecánica, una gran ventaja en pacientes con córneas delgadas o condiciones especiales.
Implementar esta tecnología en la consulta permite:
Además, puede ser integrado en evaluaciones previas a procedimientos de TRANSEPI – Cirugía Láser Refractiva o para confirmar criterios de elegibilidad quirúrgica, especialmente en pacientes con antecedentes complejos.
También forma parte de nuestro ecosistema de tecnología avanzada, asegurando que cada paciente reciba un enfoque personalizado y basado en evidencia.
Si estás en proceso de diagnóstico o necesitas un control detallado para una cirugía futura, puedes complementar tu estudio con otros exámenes visuales en Quito disponibles en nuestra institución, o explorar nuestros procedimientos visuales en Quito para resolver condiciones visuales con tecnología de vanguardia.
Menos de 5 minutos. El examen es rápido, no invasivo y sin molestias para el paciente.
No. El examen no requiere dilatación ni contacto directo prolongado con el ojo.
El CORVIS mide la presión intraocular teniendo en cuenta la biomecánica corneal, lo que mejora la precisión diagnóstica frente al tonómetro convencional, especialmente en pacientes con córneas delgadas o irregulares.
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